sábado, 3 de noviembre de 2007

soy un tronco, soy un tronco, soy un tronco...


Trabajando en deportes del Diario El Sur me tocó un día ir a cubrir un encuentro de Los Troncos por el torneo nacional de rugby. Si bien conocía el deporte, nunca me interesó más allá, como para profundizar. El tema es que lo tuve que hacer casi por obligación ese día que visite por primera vez la cancha de Tineo Park, camino a Penco. Fue mi primera conexión con el rugby y también con Los Troncos. Desde ese momento en adelante comencé a cubrir todos los partidos que el quince maderero jugaba de local y tuve la suerte de toparme con la mejor campaña que el club haya realizado en su historia. Los reporteros gráficos del diario y toda la sección son hinchas de Los Troncos y con el tiempo yo también me sentí así. Y es raro porque el otro cuadro de la zona, Old John's, también tuvo una campaña espectacular, pero Los Troncos tiene otra cosa... Hoy fui a cubrir la semifinal donde definían el paso a la final nacional justamente los ex alumnos de Saint John's (Old John's) y los de la motosierra (Los Troncos). El partido lo viví de forma intensa al igual que las casi dos mil personas que llegaron hasta la cancha de Tineo. Los Troncos ganaron 27-8 y sacaron pasajes para disputar la Copa de Oro del rugby chileno ante la poderosa Universidad Católica en Santiago. Las mismas caras que por mis tardes de reporteo veía con rostros tensos y serios hoy celebraban como niños y por supuesto yo no me quedé atrás. Me la disfruté toda y estaba feliz, pues me sentía parte de la campaña, claro que de forma anónima, desde mis coberturas en algún lugar de la sección deportiva de El Sur. Arriba está una muy buena publicidad de Los Pumas, el inmenso quince argentino que salio tercero en el último mundial. Les vi todos los partidos y con mucha, pero mucha razón los trasandinos tienen que sentirse orgullosos de sus queridos pumas y regalarles una publicidad como aquella. Yo no soy un puma soy un tronco.

domingo, 28 de octubre de 2007

Facebook, la nueva gallina de los huevos de oro

Microsoft, al parecer, se cansó de ser “golpeado” por Google. El gigante de Redmon ya había lamentado la compra de Youtube y hace unos meses el popular buscador se había adelantado al adquirir la empresa de publicidad virtual DoubleClick. Con estas compras, Google estaba dejando muy mal parada a la empresa de Bill Gate y definitivamente eso en algún momento tenía que cambiar.
Y así fue. El martes recién pasado comenzó a pulular el rumor que zanjaba otro gallito que protagonizaban estos dos monstruos de la era digital y quizás el más importante hasta ahora: La lucha por adquirir parte de la “joya” de las redes sociales Facebook.com.
Pero con el correr de las horas dejó de ser rumor ya que fue la propia Microsoft, en una conferencia de prensa, en oficializar la adquisición de la página que se convirtió en poco más de dos años en el canal de interacción más popular y sólido de Estados Unidos e incipiente en Europa.
La suma es escalofriante. Microsoft desembolsó 240 millones de dólares por una participación del 1,6% del capital accionario del sitio de socialización. Nada más que eso, sólo un 1,6%.
Tras el anuncio el valor de Facebook se disparó. Según analistas la empresa creada por Mark Zuckerberg, de 23 años, en Harvard, adquirió un valor de 15 mil millones de dólares, posicionándola de inmediato como la firma más valorada en la red. Sorprendente.
Facebook tiene cerca de 50 millones de usuarios y cada día se suman 200 mil más. En sus oficinas, ubicadas en la mítica localidad de Palo Alto, California, trabajan 300 personas y se estima que las ganancias por concepto de publicidad asciendan a los 100 millones de dólares. Cifras no muy espectaculares comparadas con otros sitios similares y que puedan, por lo menos, justificar su explosivo crecimiento comercial.
Pero bueno hay un elemento en que Facebook marca la diferencia y puede explicar todo. Un estudio de la Universidad de Berkeley arrojó que “los usuarios de Facebook provienen de contextos familiares prósperos y tienen mayores probabilidades de ingresar a la universidad. En cambio, aquellos que prefieren MySpace -su símil- suelen buscarse un trabajo al terminar la secundaria”. En resumen, es la futura elite la que lo ocupa y allí es donde las empresas quieren llegar, así se explica la ardua disputa que tuvo Microsoft, Google y en su momento Yahoo.
Facebook es la nueva gallina de los huevos de oro, de eso no hay duda.